La renovación del águila:
El águila es el ave que alcanza mayor longevidad. Llega a vivir 70 años, pero a los 40 debe tomar una seria y difícil decisión. En esta etapa de su vida, sus uñas están apretadas y flexibles, y por ello no consiguen atrapar a las presas de las cuales se alimenta. Su pico, largo y puntiagudo, se curva apuntando sobre el pecho.
Sus alas están envejecidas y pasadas, y sus plumas, gruesas.-
¡Volar se hace tan difícil!
Entonces, el águila tiene solamente dos alternativas: morir o enfrentar un doloroso proceso de renovación, que dura 150 días.
Este proceso consiste en volar hacia lo alto de una montaña y quedarse ahí, en un nido cercano a un paredón, donde no tenga necesidad de volar. Después de encontrar ese lugar, el águila comienza a golpear con su pico en la pared, hasta arrancarlo. Una vez logrado esto, debe esperar el crecimiento de uno nuevo, con el que desprenderá sus uñas una a una. En el momento en que las nuevas comiencen a nacer, empezará a arrancar sus plumas viejas. Cumplidos los cinco meses (150 días), sale para el famoso vuelo de renovación, y para vivir 30 años más.
En nuestra vida muchas veces tenemos que guardarnos por un tiempo y comenzar un proceso de renovación para continuar un vuelo de victoria. Debemos desprendernos de costumbres, tradiciones y recuerdos que nos causaron dolor o que nos detuvieron en nuestro crecimiento.
Solamente libres del peso del pasado podremos aprovechar el resultado valioso que una renovación siempre trae consigo.
martes, 24 de febrero de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario